A veces ocurre que
un gol nos recuerda a otro tanto convertido, sea por la jugada o por la definición. En algunas ocasiones, se repite el autor; en otras no. Vamos a repasar unas situaciones similares que se han dado en la historia de Boca, sin ningún orden ni criterio en especial, más que el de elegir
goles "calcados"
El
Héber Mastrángelo, tenía como costumbre
encarar por derecha y en ocasiones,
acomodarse para la zurda y así
rematar al arco.
De este modo le hizo un gol a Quilmes, por el Metro 78
... y de manera similar,
definió ante el Deportivo Cali, en ese mismo año, pero
por la final de la Copa Libertadores
El "Mono" Perotti le hizo dos goles calcados a River en el mismo año, 1980, pero en partidos distintos.
Ambos de tiro libre y en La Bombonera. Por el Metro:
Y por el Nacional,
para ganar 1-0 con este tanto.
Carlos Daniel Tapia, jugaba muy bien al fútbol. Estuvo en Boca entre 1985 y 1994, con algunos períodos en los que pasó por el fútbol europeo. En el '85, le metió un gol de emboquillada a Estudiantes y a los pocos meses le metió otro muy similar, aunque con la pierna derecha, a Chacarita Juniors.
Los siguientes ejemplos son muy singulares. Ocurrieron en clásicos
contra Racing en cancha de Vélez, fueron tantos
marcados por los laterales derechos,
sobre los minutos finales,
en el mismo arco y con remates desde el vértice del área. Estamos hablando de
Luis Abramovich en 1987 y
Diego Soñora en 1990, ambos triunfos 1-0.
Difícil recordar estas jugadas y menos que menos relacionarlas, pero tanto en la forma del remate de quien hace el gol, como en el leve desvío en un contrario, hay un punto coincidente. Claudio Dykstra frente a Instituto en el '87 y Marcelo Delgado contra Barcelona de Ecuador en la Libertadores 2003 son los siguientes ejemplos
Juan Román Riquelme siempre ha sido proclive a definir con calidad, con alguna sutileza, colocando la pelota con precisión. De este modo definió contra El Nacional de Ecuador en la Libertadores 2000. Practicamente un año después, pero por el torneo local, le hizo un gol similar a Rosario Central. Vean si no.
No se trata de una brillante acción individual, ni de una interesante combinación colectiva. Simplemente la aparición de Battaglia sobre la línea para asegurar el gol. Ocurrieron en el mismo año, 2008, ante Gimnasia y Esgrima de Jujuy y Tigre
Seguramente nadie debe imaginar
que Riquelme y Palermo hicieron goles parecidos. Pero sí, hubo, y fueron
dos cabezazos que tuvieron en común el jugador que tira el centro y el arco en el que se convierte el gol.
Pablo Ledesma manda un envío al área y es, en el primer video,
Martín Palermo quien convierte ante
Vélez, por la
Copa Libertadores 2007 el 2 de mayo de ese año.
Juan Román Riquelme la mete de cabeza
once días después,
ante Arsenal por el Clausura, también gracias a un centro de
Ledesma. Es cierto, no son idénticos, pero tienen algunos puntos en común.
Pero si hablamos de goles iguales, no hay dudas que
los que marcó Diego Armando Maradona ante Instituto de Córdoba en 1981, en el mismo partido, y con una diferencia de minutos, es un récord difícil de igualar. Dos goles de emboquillada y Boca ganó 4 a 1.